Desde hace más de 15 años Mark Comerford y Sarah Mottram han dirigido sus investigaciones a poder valorar de una forma correcta y fiable las posibles disfunciones y anomalías de los movimientos de la columna vertebral y las extremidades. El fruto de su trabajo se ha visto plasmado en el movimiento "Kinetic Control" y en el libro "Kinetic Control: The Management of Uncontrolled movement" recientemente editado.
Esta escuela de pensamiento dentro de la fisioterapia sigue la estela de la ilustre fisioterapeuta norteamericana Shirley Sahrmann, la primera en clasificar las disfunciones-anomalías en los movimientos y relacionarlas con las diferentes patologías de los pacientes.
Así la fisioterapia basada en control motor (la traducción al castellano de Kinetic Control) pasa de centrarse en el análisis del estado de las articulaciones (como hacen la mayoría de las escuelas de terapia manual, la osteopatía, etc...) para centrarse en cómo se realizan los movimientos y, sobretodo en cómo funcionan los músculos.
Para ello utiliza la mejor evidencia científica disponible actualmente (electromiografía, ecografía, resonancia magnética funcional) para clasificar los músculos en tres categorías según su FUNCIÓN:
MÚSCULOS ESTABILIZADORES LOCALES
-Son monoarticulares
-Mínimo cambio de longitud cuando trabajan
-Evitan la translación entre las vértebras o las articulaciones
- No son muy fuertes, mantienen la rigidez y el control del movimiento de la columna en todas las direcciones
-Sin músculos antagonistas
-Se anticipan activándose antes de los movimientos de las articulaciones
-Tónicos, se contraen a baja intesidad
- Ejemplo característico: el músculo multífido espinal intervertebral, el transverso abdominal o las fibras oblicuas del vasto medial del cuádriceps
-Más superficiales
-Puedes ser monoarticulares o poliarticulares
-Fuertes, su contracción sí produce movimiento
-Su función principal es el control excéntrico, frenando los movimientos mientras se estiran
-Trabajan en una dirección solamente y tienen, por tanto, músculos antagonistas en la dirección contraria
- Pueden trabajar de forma tónica o fásica (se contraen a baja intensidad como tónicos, pero se pueden volver fásicos y trabajar a alta intesidad)-Ejemplo: los oblicuos abdominales o los isquiotibiales de las piernas
MÚSCULOS MOVILIZADORES
-Son los más grandes y superficiales
-Siempre poliarticulares, unen varias articulaciones
-Fuertes, destinados a la contracción explosiva, a mover grandes cargas con las extremidades
-Unidireccionales y con músculos antagonistas
-Son fásicos, trabajan contra grandes resistencias, a alta intensidad de contracción.
-Ejemplo: Pectoral mayor o el Recto femoral
CLASIFICACIÓN SEGÚN SU FISIOLOGÍA Y UMBRAL DE CONTRACCIÓN
los análisis electromiográficos dividen a los músculos en dos grupos
-TÓNICOS, fibras rojas, de bajo umbral de contracción y se fatigan muy lentamente. Esto significa que se contraen con esfuerzos de baja intensidad (menores de un 25% de la máxima contracción voluntaria), o incluso anticipándose a los movimientos de las extremidades.
-FÁSICOS, de fibras musculares blancas, de alto umbral de contracción y que se fatigan rápidamente. Se contraen con esfuerzos de más del 40% de la máxima contracción voluntaria posible.
EL PROBLEMA: PATRONES ANORMALES DE MOVIMIENTO
Cuando se tiene dolor, especialmente cuando el dolor es repetitivo o perdura en el tiempo como en la columna vertebral, se desarrollan patrones aberrantes de movimiento.
Normalmente todo empieza cuando, como consecuencia del dolor o la degeneración articular provocada por malas posturas sostenidas, los músculos estabilizadores locales se inhiben, dejan de trabajar, perdiéndose el control en los micromovimientos de translación entre las vértebras, lo cual irrita el disco intervertebral y las terminaciones nerviosas alrededor de las articulaciones entre ambos segmentos vertebrales.
Entonces el cuerpo, intentando mantener la estabilidad, pone a trabajar a máxima intensidad (de forma fásica y fatigable) los músculos estabilizadores globales (el cuadrado lumbar. los oblicuos abdominales, el trapecio y otros), que pese a todo son incapaces de controlar la translación intervertebral, ya que sus inserciones musculares, su geometría, no lo permite. Persiste la inestabilidad y, además, aparecen las contracturas musculares, puntos gatillo, etc. en estos músculos profundos.
Como el cuadro doloroso persiste ya que sigue la inestabilidad, puede ocurrir que incluso los músculos movilizadores superficiales intenten actuar como estabilizadores. Se contraen entonces en situaciones de bajo umbral, ante estímulos en los que no deberían trabajar. Esto cierra el círculo, ya que empiezan a trabajar antes que los estabilizadores globales, lo que acaba fomentando que estos últimos inhiban también con el paso del tiempo. Esto es lo que describe Sharmann como un problema de dominancia.
Terminamos entonces con más inestabilidad, tanto entre una vértebra con otra, como en la columna globalmente al mover las extremidades. Los músculos funcionan al revés, con los estabilizadores cada vez más inhibidos y atrofiados y los movilizadores cada vez más dominantes y contracturados, trasladando además tensiones hacia las extremidades, extendiendo el dolor.
En estas situaciones actividades triviales suponen un gran esfuerzo muscular, con una sensación de fatiga prácticamente permanente, y provocando más dolor por el progresivo aumento de la inestabilidad.
TERAPIA DE CONTROL MOTOR
VALORACIÓN DE LA DISFUNCIÓN
Primero hay que ver en qué fase del problema se está y ponerle remedio. Para ello existen pruebas sencillas validadas por la evidencia científica que permiten identificar si el problema es el fallo de estabilidad local con hipertranslación, o bien un problema en un movimiento global con los estabilizadores globales, o bien existe un problema de restricción articular, miofascial o neurodinámica.
Estos tests dirigidos a deportistas están protocolizados mediante una herramienta informática llamada "The performance Matrix" creada por Comerford y Mottram
EJERCICIOS DE CONTROL MOTOR
La solución al típico problema que provoca y mantiene el dolor crónico en la columna, pasa por una fase inicial de estimulación de los estabilizadores locales de la columna, mediante contracciones de baja intensidad sin dolor. Cuando estos ejercicios ya no suponen un esfuerzo, se progresa añadiendo movimiento en las extremidades.
Después se trabaja con ejercicios dirigidos a los movimientos globales, controlados por los estabilizadores globales y ejercicios de estabilidad con más demanda (como los de McGill, por ejemplo).
Finalmente se busca la recuperación funcional con actividades más complejas, hasta conseguir la vuelta a la actividad deportiva sin dolor.
TERAPIA EN EL INSTITUTO DE COLUMNA
Desde nuestro centro, aplicamos este enfoque inicialmente en aquellos pacientes con graves problemas de inestabilidad y dolor crónico. Valoramos las posibles restricciones miofasciales, articulares y neurodinámicas y las tratamos con terapia manual mientras, paralelamente enseñamos a los pacientes ejercicios para el estimulo de los estabilizadores profundos (el transverso abdominal, el suelo pélvico y los multífidos profundos).
Cuando empezamos con el protocolo de Potenciación Muscular Selectiva de los estabilizadores de la columna con los equipos Medx, siempre se trabaja el correcto reclutamiento neuromuscular en una primera fase en cargas bajas para ir progresando poco a poco, hasta el máximo fortalecimiento, hasta un nivel óptimo comparado con individuo similares en edad y peso scorporal